La
garcilla bueyera bubulcus ibis, es una especie bastante
singular en muchos aspectos. Lo es por su expansión desde mediados
del siglo XIX, cuando era una especie ubicada en zonas tropicales de
África. Desde entonces comenzó a colonizar territorios, y hoy en
día su distribución es prácticamente cosmopolita.
Otro
rasgo de singularidad de esta garza, es su poca dependencia de las
masas de agua dulce. De hecho resulta mucho más fácil detectarla
en campo abierto que en humedales, aunque también se encuentra en
éstos. Además tiene un comportamiento migrador bastante errático,
que hace difícil definir con exactitud sus movimientos a lo largo
del año, aunque es cierto que después de reproducirse, a menudo en
colonia mixtas con otras ardeidas, suele moverse y nomadear sin poder
determinarse con exactitud el alcance de estos movimientos.
En
nuestra provincia existen algunas colonias de cría, pero en nuestro
término, al menos en las últimas décadas no se ha constatado su
reproducción. Sin embargo si era frecuente hace unas décadas como
especie invernante, y su gregarismo la llevaba a ser avistada en
numerosos puntos.
Pero
en los últimos años -puede que en los 20 últimos- su presencia en
Marbella ha decrecido notablemente, puede que debido al poco hábitat
adecuado disponible para ellas, pues como indica su apellido de
“bueyera”, es un ave que aprovecha la presencia de ganado para
obtener alimento, generalmente insectos y parásitos del ganado, y
también ocupa campos de labor, dehesas y pastizales.
Ayer
sin embargo si que observé a varios ejemplares en la zona E del
municipio, justo en la zona donde antaño conocía de un dormidero
bastante considerable de esta garza de hábitos comunales, y que
aunque parece que ahora en menor medida, aún sigue usándolo.
Se
le han dado numerosos nombres vernáculos a esta singular ave, y aquí
en Marbella yo he conocido varios de ellos, todos relacionados con su
costumbre de desparasitar al ganado. Espulgabueyes y reznero, este
último haciendo referencia a “rezno”, que es una acepción
de garrapata y otros ácaros propios del ganado.