De entre los fringílidos, posiblemente sea el más discreto, pero no deja de ser llamativo. El pardillo común Linaria cannabina posee una coloración pardusca -de ahí el nombre-, pero el macho presenta en época reproductora una llamativa mancha roja en el pecho y en el píleo.
En Marbella es más frecuente en invierno, cuando se reciben ejemplares norteños invernantes, mientras que como reproductor es más escaso. Aún así se reproduce, y en estos días pasados he detectado varias familias -ya con pollos volanderos-, recorriendo los campos en busca de alimento. Tengo recuerdos de bandos muy numerosos de esta especie en nuestro término -de más de un centenar de ejemplares -, en época de invernada. Hoy resulta raro ver un bando de más de una decena.
Se extiende por gran parte de Eurasia y el norte de África, rarificándose en las zonas más septentrionales, y tiene un comportamiento migrador algo complejo, con poblaciones sedentarias, otras parcialmente migradoras, que llegan a Iberia y hasta el norte de África procedentes, tanto de latitudes septentrionales, como de zonas de altitud de la propia Iberia.
Prefiere zonas abiertas, con no mucho arbolado, y se alimenta de semillas de herbáceas en general. Suele ser gregario, formando en ocasiones bandos mixtos con otros fringílidos, que recorren los campos un tanto erráticamente.
Como he dicho antes, en Marbella no es muy común como reproductor. De entre los fringílidos reproductores en Marbella, posiblemente el más escaso.