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| Mochuelo europeo Athene noctua |
El mes de febrero es,
ornitológicamente hablando, un mes de transición. El invierno va
tocando a su fin -al menos por el sur ibérico- y algunas aves
comienzan a mostrar signos de celo. Por otro lado empiezan a llegar
algunas de las especies que nos abandonaron a finales de verano o
comienzos del otoño.
Los primeros estivales
que ya han llegado a Marbella son dos especies de hirundínidos: la
Golondrina común Hirundo rustica y el Avión común Delichon
urbicum. Los primeros los vi el pasado día 6, una fechas que
suelen ser las habituales de primeras llegadas de estas especies a
Marbella. Todavía no son muchas y pueden pasar desapercibidas, pero
poco a poco irán llegando más y en unas semanas darán un toque
primaveral a nuestros campos y ciudades.
Una agradable sorpresa
fue días atrás el comprobar que el Mochuelo europeo Athene
noctua, nuestra rapaz nocturna más común, está recolonizando
algunos de sus antiguos dominios. Hace algo más de una década y
coincidiendo con una regresión generalizada de la especie en toda la
península ibérica, desaparecieron casi por completo de nuestro
término. No tengo claras las causas de este declive pero al mismo
tiempo no me cabe duda del mismo. Lo pude comprobar el varios
territorios que tenia controlados desde hacia años y de donde esta
simpática nocturna desapareció.
Desde hace un par de años
noto que poco a poco se van viendo más Mochuelos, que parece que han
superado el bache. Desde hace unas semanas veo con frecuencia a una
pareja, ya con indicios de celo, que parece que han conseguido
establecerse con éxito.
Son aves muy
territoriales y sedentarias, que pasan todo el año en su territorio,
donde cazan insectos, pequeños vertebrados e invertebrados que
componen su dieta.
Prefieren zonas con
arbolado disperso y con cobertura arbustiva no muy densa, que les
permita cazar desde un posadero a su pequeñas presas.
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