lunes, 30 de octubre de 2023

El humilde lentisco.

 

Esta planta típicamente mediterránea, el lentisco Pistacia lentiscus, se encuentra en estas fechas repleta de su bayas o mejor dicho drupas, primero de un intenso color rojo, que al madurar se vuelve casi negro.

Sirve de alimento a una gran cantidad de fauna y sobre todo a las aves. Son innumerables las especies que se alimentan de ellas durante el otoño e invierno, y alguna que otra de estas aves se han considerado casi exclusivamente insectívoras; pero cuando les falta su fuente alimenticia no dudan en acudir a este matorral a nutrirse.

Paloma torcaz.

Normalmente se desarrolla como arbusto, pero con el paso del tiempo, y si las condiciones son adecuadas, puede llegar a ser un árbol de hasta 6 o 7 m de altura. Alguno de ellos conozco yo en nuestra localidad con porte arbóreo.

Como dije al principio es una especie que vive en la Europa mediterránea, el norte de África y el próximo Oriente, y por lo tanto está muy adaptada a la escasez hídrica y las altas temperaturas. A pesar de ello siempre luce verde y da un toque de frescor al ambiente.

Verderón común.

Es capaz de desarrollarse sobre diversos tipos de suelo, desde las dunas costeras, hasta los roquedos mas inhóspitos, siempre sobre ambientes térmicos, pues no soporta las heladas.

Aunque se usa en jardinería, desde luego en Marbella no demasiado. En el actual contexto de sequía debería promocionarse más su presencia en jardines públicos, pues como queda dicho siempre tiene hojas verdes y sirve de alimento y cobijo a una gran variedad de fauna autóctona.

Curruca rabilarga.


No es la única planta que en estas fechas produce frutos que consumen gran cantidad de aves. Enebros, sabinas, acebuches y algunas más, constituyen una fuente de alimento para las aves -tanto residentes como invernantes-, que ahora se encuentran en nuestro medio natural.

domingo, 22 de octubre de 2023

Ahora, migrantes presaharianos.

Ya entrando en los últimos días de octubre, todavía se detectan movimientos migratorios destacables. Aunque en entradas anteriores dije que la migración de paseriformes estaba llegando a su fin, en realidad me refería a los que migran hasta debajo del Sáhara (transaharianos), porque los que se quedan por encima, en el N de África, ahora siguen pasando en buenos números. Estos son los migrantes presaharianos.

Jilguero europeo


Entre los paseriformes son los fringílidos los que se llevan la palma. Suelen formar bandos de cierta entidad, viajan durante el día y resultan por lo tanto detectables con relativa facilidad. Estos días he visto varios de estos bandos, en ocasiones de varias especies, en vuelo hacia el estrecho para dar el salto al continente africano. Jilgueros, verderones, pardillos o pinzones vulgares, son algunas de estas especies de paseriformes que ahora se están moviendo en su viaje migratorios. Pero no son los únicos.

Serín verdecillo

Y también muy destacable estos días ha sido el paso de paloma torcaz Columba palumbus. Un ave con un comportamiento migrador complejo, cuya población ibérica se puede considerar como sedentaria, pero que en invierno se ve notablemente incrementada por la llegada de ejemplares del centro y norte de Europa. Es una especie en expansión, y que en Marbella se ha hecho bastante común, incluso llegando a penetrar en zonas urbanas. 

Paloma torcaz.

Una fracción de estos migrantes extraibéricos cruzan al norte de África, y en estas fechas se detectan estos movimientos en nuestra localidad, en ocasiones con bandos de centenares de ejemplares. 

domingo, 15 de octubre de 2023

Van llegando invernantes.

 

En estas fechas ya de pleno otoño -al menos por el calendario-, comienzan a llegar las especies invernantes. En días pasados ya he detectado a mosquitero común, zorzal común, y un notable aumento de curruca capirotada Sylvia atricapilla, que es la protagonista que he elegido hoy.

Macho (capirote negro).

Es un pájaro muy frecuente en Europa, latitudes medias de Asia y el norte de África y con un comportamiento migratorio bastante complejo, con poblaciones residentes, migradoras parciales e incluso migradoras transaharianas.

Al ser una de las aves con más datos de anillamiento, se sabe que la población invernante ibérica procede de Europa occidental, incluyendo las Islas Británicas. Y también se sabe por esto mismo, que una buena parte de las capirotadas del norte de España se desplazan al sur y levante a partir de septiembre.

Hembra (capirote marrón).

En Marbella está presente todo el año, si bien en época reproductora solo se encuentra en ambientes forestales o semiforestales umbríos y húmedos. La región biogeográfica termomediterránea -donde nos encontramos-, es la preferida por esta curruca para invernar, principalmente por la abundancia de frutos de los matorrales propios de este entorno. Y también en los olivares , donde esta especie encuentra uno de sus hábitats óptimos, pues es un gran consumidor de aceitunas. Allí donde hay olivos hay capirotadas invernando. A pesar de tenerse como ave insectívora, consume una gran cantidad de bayas y frutos durante el otoño-invierno.


Ahora están llegando a nuestro medio natural, incluso resultan muy frecuentes en parques y jardines, pero todavía su número irá en aumento las próximas semanas, hasta llegar a ser una de las especies más comunes en invierno en nuestro municipio.


miércoles, 11 de octubre de 2023

Estornino negro, un pájaro urbanita.

 

El estornino negro Sturnus unicolor es un pájaro común en Iberia, pero tiene la singularidad de que su área de distribución no es demasiado amplia. Solo vive en España, las islas de Sicilia, Córcega y Cerdeña y el noroeste de África.

En nuestra localidad es común, y aunque su tendencia a nivel nacional se estima como estable en las últimas décadas, yo tengo la impresión de que al menos aquí, cada vez son menos.


Es muy adaptable y puede alimentarse de casi cualquier cosa y ocupar una gran variedad de ambientes, aunque siente predilección por entornos humanizados.

No obstante también se ve en campo abierto y puede llegar a criar en huecos de árboles o grietas en las rocas, si bien en la ciudad aprovecha cualquier oquedad que le brinden las construcciones humanas para situar el nido.



No suele realizar movimientos migratorios destacables, apenas pequeños movimientos dispersivos y algunos de nomadeo durante el invierno, sobre todo si este es riguroso.

Una característica muy llamativa de este pájaro es su canto. Es tan variado su repertorio que resulta difícil describirlo. Es un verdadero “artista” capaz de hacer imitaciones que pueden llegar a confundir al más avezado observador y además posee un repertorio propio, bastante variado y en el que es destacable un “silbido” penetrante que realiza muy a menudo. 

Juvenil.

En la ciudad puede llegar a formar dormideros de centenares de aves, de los que yo recuerdo varios en Marbella, y era un auténtico espectáculo verlos llegar y aquella algarabía que se formaba con sus potentes y variados reclamos. 


sábado, 7 de octubre de 2023

Orugas de Macaón.

 

La mariposa macaón Papilio machaon, es una de las más grandes y coloridas que viven en nuestra zona. Además resulta relativamente frecuente, sobre todo en primavera, y no suele ser difícil de observarlas cerca.


Otra cosa ya es dar con sus orugas, también de una belleza notable. Tuve suerte uno de estos días y pude dar con unas cuantas alimentándose en una de sus plantas nutricias el popular hinojo Phoeniculum vulgare, planta frecuente en entornos degradados. Además -y para mi sorpresa-, había orugas en diferentes estados de maduración.


Se distribuye por gran parte del hemisferio norte, incluyendo zonas de Norteamérica. En nuestra provincia vuela casi todo el año. En Marbella evidentemente puede observarse prácticamente todo el año en vuelo, y como dije antes lo complicado es dar con sus orugas, que aunque no deben ser pocas, resulta complicado dar con ellas entre la densa vegetación de la que se nutren.



martes, 3 de octubre de 2023

Triada de paserifomes migradores.

 

En estos primeros días de octubre continua la migración postnupcial a buen ritmo. Sobre todo en lo referente a paseriformes, aunque no puede darse por finiquitada, ni mucho menos, las de aves planeadoras. Y por supuesto que limícolas, marinas y otros grupos de aves también continúan con sus respectivos periplos migratorios. Pero hoy me centraré en tres paseriformes, viajeros impenitentes que estos días podemos ver en Marbella, descansando y reponiendo fuerzas.

El papamoscas cerrojillo Ficedula hypoleuca es uno de los más numerosos y relativamente fáciles de detectar. Suelen parar en zonas arboladas, donde se mueven entre el arbolado a la caza de algún insecto en vuelo o en el suelo. Necesitan mantener su grasa corporal para reemprender el vuelo migratorio lo antes posible. Esto es común al resto de las especies de paseriformes.



La curruca mosquitera Sylvia borin, es probablemente la más discreta de las tres especies que componen esta entrada. Apenas emite vocalizaciones, es de una coloración poco llamativa y casi siempre anda enramada en árboles y arbustos. A pesar de todo este año, en mi opinión, hay bastantes.


También se dejan ver en buen número todavía los mosquitero musicales Phylloscopus trochilus, que se dedican a buscar entre los árboles sobre todo, a pequeños insectos que cazan con avidez, recorriendo isistentemente y con inusitada rapidez todo tipo de árbol o arbusto.



Las tres especies son bastante comunes en la Europa central y septentrional, y esto hace que su paso migratorio sea notorio. Otras especies más escasas resultan obviamente más difíciles de detectar, pero estas tres al menos -las dos primeras llegan a criar en la mitad norte de Iberia-, se pueden detectar incluso en parques y jardines, o en el arbolado urbano.