domingo, 28 de noviembre de 2010

Buitre leonado inesperado

El insigne ornitólogo y naturalista José Antonio Valverde dijo en una ocasión: "Las aves vuelan y las lleva el viento". Parece una obviedad, pero a lo que se refería este sabio de la ornitología, es que algunas veces nos podemos encontrar a un ave en un lugar que no le corresponde, simplemente porque son libres de elegir a donde ir.
Y esto me ha sucedido a mi hoy. Ver un Buitre leonado Gyps fulvus, prácticamente en la playa, sobrevolando la desembocadura del rio Guadalmansa, en Estepona.
La razón que podía tener este gran carroñero para venir a  una zona tan humanizada, no es fácil de adivinar, pero quizás la explicación más sencilla es que provenga de la cercana colonia de Casares y que se haya dado un "paseo" en busca de alguna carroña.
 Desde hace unos años se observan algunos ejemplares solitarios patrullando zonas que en principio quedan un poco lejos de sus colonias. En Marbella se dejan ver en algunas ocasiones sobrevolando Sierra Blanca, como sin duda hicieron antaño, cuando la ganadería les proporcionaba suficientes carroñas.  Lo cierto es que desde la eliminación de los muladares a causa del mal de las "vacas locas" estas grandes rapaces pasan dificultades para alimentarse y puede que esto las empuje a salir fuera de sus territorios habituales.
En cualquier caso se agradece una observación como ésta, por inusual y llamativa.

miércoles, 24 de noviembre de 2010

Culebra viperina

El pasado domingo tuve la ocasión de encontrarme frente a frente con este reptil amante de las zonas húmedas. Fue en una zona húmeda cercana a Estepona, donde este cazador implacable de anfibios, peces y otros pequeños vertebrados e invertebrados, se encontraba soleandose. Se trata de la Culebra viperina Natrix maura, un ofidio de mediano tamaño que habita la Europa suroccidental y el norte de África.
Era un ejemplar de considerable tamaño para la especie ya que debia medir unos 80 cm aproximadamente. En España ocupa casi todo el territorio, siempre que existan masas de agua dulce.

 Al sentirse acosada despliega un comportamiento muy parecido al de su pariente la Víbora (de ahi el nombre de viperina), enrollando su cuerpo y haciendo que su cabeza aparezca con un diseño triangular e incluso emitiendo bufidos. Todo ello con el objetivo de intimidar al agresor haciendole creer que se trata de un enemigo mucho más peligroso. Un interesante animal que cada vez resulta más complicado de localizar en las  escasas y maltrechas zonas húmedas que nos quedan.

domingo, 14 de noviembre de 2010

Migración de fringílidos

Durante los meses de octubre y noviembre tiene lugar la migración otoñal de varias especies de fringílidos.
Hoy mismo he detectado el paso en buenas cantidades de Jilgueros Carduelis Carduelis y en menor número de Lúganos Carduelis spinus.
Viajan en grupos de diferente tamaño, aunque a menudo con más de 20 individuos, y lo suelen hacer costeando, es decir muy cerca de la playa.
Buscan el cercano estrecho de Gibraltar, para desde alli dar el salto al norte de África, donde pasaran los meses más frios del cercano invierno.
Pero no dejaran huérfanos a nuestros campos de su presencia, al contrario, una fracción muy importante de ejemplares procedentes del centro y norte de Europa se quedará por aqui, y pasará el invierno en estas tierras.
El caso del Lúgano es un tanto especial. Presenta una invernada irregular, con años de escasa presencia y otros de abundancia de invernantes. Posiblemente esto sea debido a las condiciones meteorológicas reinantes en sus lugares de origen, que cuando son muy adversas, propician un éxodo masivo hacia el sur, mientras que en años benévolos el flujo de migrantes se queda en zonas más norteñas.
El fenómeno migratorio entre Europa y África se encuentra ya en sus últimos días, y de aqui a poco cesará definitivamente; aunque con la promesa de reiniciarse ya en enero, cuando algunos de los que se marcharon a pasar el invierno al calor de África, regresen a la vieja Europa a preparar el próximo ciclo reproductor.

jueves, 4 de noviembre de 2010

Estornino pinto

Aunque no en gran número, este visitante invernal ya se hace presente en los campos de la costa del Sol. Se trata del Estornino pinto Sturnus vulgaris, bello pajaro con irisaciones muy llamativas en su plumaje, que vagabundea por los campos en busca de alimento. Consume casi de todo, desde insectos hasta semillas e incluso aceitunas, lo que le hace ser considerado como plaga en los olivares andaluces.
Por aqui no es muy abundante y se concentra en algunos enclaves muy localizados. Forma bandos, incluso mixtos con sus parientes cercanos los Estorninos negros, que patrullan los campos en busca de sustento. No se conocía su reproducción en España hasta hace relativamente poco tiempo -en los ultimos 25 o 30 años-, cuando se ha constatado su reproducción en Iberia en algunos puntos del norte peninsular.
Es por lo tanto un invernante nato en estas latitudes y los ejemplares proceden, con casi total seguridad, del centro de Europa.