domingo, 19 de junio de 2016

El pequeño Buitrón.

Esta avecilla de pequeño porte es el Buitrón Cisticola juncidis. Tan diminuto es su tamaño -apenas 10 cm- que pasa por ser la segunda ave más pequeña de Iberia, solo por detrás del Reyezuelo. Esta cualidad ha hecho que se le den nombres en diversos lugares de España, haciendo mofa de su diminuto tamaño. En Marbella se le ha conocido, hasta donde yo sé, por Tumbacarretas, nombre vernáculo que comparte con otros lugares del sur del país.
Habita en zonas tropicales de África, Asia y Australia, así como en la cuenca mediterránea y Oriente medio. Se alimenta de pequeños insectos y arácnidos que busca entre las hierbas más o menos altas, que constituyen su hábitat. En estas praderas húmedas, generalmente cerca de cursos de agua, lleva a cabo todo su ciclo biológico y es de destacar que el nido de estos pequeños seres alados es un verdadero prodigio. Construido entrelazado entre la densa vegetación, es una pequeña bolsa en forma de pera a base de materia vegetal y telarañas, recubierto primorosamente en su interior con las mas suaves materias vegetales. Ni que decir tiene que encontrar uno de estas obras de arte no es fácil. El tamaño y lo bien disimulado que se encuentra con el entorno, me han tenido en más de una ocasión algunas horas en su busca, y solamente en dos o tres ocasiones he logrado dar con él.
También es muy característico su canto, emitido en vuelo ondulante a cierta altura, que tiene como objetivo delimitar el territorio, y que en la primavera es uno de los sonidos más característicos de las llanuras abiertas.

En Marbella es un habitante habitual de estos ecosistemas, si bien su número parece fluctuar bastante entre años. Todavía a estas alturas del año pueden encontrarse en plena reproducción, pues parece ser que llevan a cabo más de una puesta anual.

viernes, 17 de junio de 2016

Rara

Onychogomphus uncatus es el nombre científico de esta criatura que pude fotografiar hace unos días en el rio Guadaiza, ya en el termino de Benahavis, aunque muy cerquita del límite con Marbella.
Es un Odonato con grado de amenaza a nivel nacional , que habita en ríos de corriente rápida y de cauce no muy ancho, del sudoeste de Europa (Iberia, Francia e Italia) y el noroeste de África (norte de Argelia, Túnez y Marruecos).
En España se distribuye por todas las zonas, aunque falta en amplios sectores, sobre todo en las mesetas. Su principal amenaza es la pérdida de hábitat en su fase larvaria, debido a la alteración de los cauces fluviales por extracción de agua o de áridos, asi como por contaminación, pues es muy sensible a estos factores adversos.

Suelen volar entre mayo y octubre, así que son fechas propicias para visitar los ríos y otras zonas húmedas donde descubrir a ésta y otras especies de estas singulares y primitivas criaturas aladas.

martes, 7 de junio de 2016

Tres especies de Odonatos

Macho de Cordulegaster boltonii
Estos “otros” seres alados, se encuentran en estas fechas en su máximo apogeo.
Los Odonatos (Libélulas y Caballitos del diablo) son unos seres vivos realmente peculiares. Tienen dos etapas muy diferenciadas en su vida. En la primera, como larvas, viven en medios acuáticos de todo tipo. En su segunda etapa llevan una vida más divagante, a menudo alejada de los cursos fluviales, e incluso llegando a realizar migraciones de cierta entidad.
En estos días pasados he podido fotografiar a estas tres especies en Marbella.
hembra de Orthetrum coerulescens.
La primera es Cordulegaster boltonii, una de las de mayor tamaño que podemos observar en nuestro territorio y de una indudable belleza cromática. La segunda es una hembra de Orthetrum coerulescens, una especie con un marcado dimorfismo sexual y de un tamaño medio, al igual que la tercera, que es una hembra de Trhitemis annulata, una de las especies más comunes que nos podemos encontrar ahora en los montes.


Hembra de Trhitemis annulata

jueves, 2 de junio de 2016

Últimos migrantes.

A primeros del mes de junio todavía es posible observar a algunas aves migrantes camino de sus zonas de cría. El Abejero europeo Pernis apivorus, se encuentra ahora en pleno paso prenupcial y aunque mucho menos notorio que el postnupcial, pueden verse algunos ejemplares por Marbella.
Durante la segunda quincena de mayo vi varios ejemplares aislados y un pequeño grupo de 9 y ayer mismo, tres ejemplares me sobrevolaron a no mucha altura.
Estas formidables aves migradoras crían en buena parte de Europa y Asia occidental, hacia donde ahora se dirigen, para a finales de agosto reemprender viaje de vuelta al África subsahariana, concentrándose en gran número en las inmediaciones del estrecho de Gibraltar.

En España cría en el tercio norte y algunas montañas de la zona central, aunque alguna pareja aislada puede hacerlo en enclaves favorables de la mitad sur. De hecho existe una cita de cría de hace ya unos añitos en la cercana sierra Palmitera.