Mediados de marzo y todavía algunas invernantes continúan por aquí. No se quedarán mucho más y de hecho, ya se nota que sus números son menores que en pleno invierno.
Es el caso de la gaviota sombría Larus fuscus. Esta gaviota que es bastante parecida a la patiamarilla, tan común en plena ciudad últimamente. La sombría comparte con su pariente la patiamarilla, además del hábitat, bastantes hábitos alimenticios. Como su familiar cercano es asidua en vertederos, se mueve por humedales interiores y costas, y en general es bastante oportunista. En las colonias de cría, pueden compartir espacio con su pariente y no resulta del todo raro que se den parejas mixtas.
Hasta 3 subespecies pueden verse en Iberia, aunque fuscus resulta en la práctica una rareza. La subespecie graellsi, cría en algunas colonias del norte ibérico, sobre todo en el cantábrico y en el delta del Ebro. La subespecie intermedius, propia de Escandinavia y graellsi, son las que suelen verse en invernada en nuestra costa y otros puntos del sur de Europa y el oeste de África, ya que esta especie es una gran migradora. Las provincias de Cádiz y Málaga albergan una población invernante bastante importante de esta especie.
Por su gran adaptabilidad está en expansión en las últimas décadas, no presentando problemas de conservación a día de hoy.
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