Ya llegan.

 

Ya desde hace unas semanas están llegando a nuestra localidad las primeras aves que podemos considerar como estivales. Se trata de nuestras queridas golondrinas y aviones, especies de alimentación insectívora, tremendamente beneficiosas para el ser humano, pues las cantidades de mosquitos y otros pequeños insectos que consumen, nos evitan muchas molestias y posiblemente algo más.

Avión común.

Pero a pesar de ello muchas veces no nos portamos bien con ellas. Veo con preocupación como se les ponen trabas para que aniden, colocando diversos “artilugios” en nuestros edificios para evitar que coloquen sus nidos.

Más grave aún es la destrucción de sus nidos de barro de manera directa. A este respecto hay que señalar que este hecho, la destrucción de sus nidos, huevos o pollos está considerado como delito en el actual código penal.

Juvenil de golondrina común.

Las pequeñas molestias que estas aves nos puedan ocasionar al colocar sus nidos en aleros, balcones etc, son fácilmente solucionables colocando bajo ellos una superficie que permita recoger los excrementos –de hecho ya se venden en algunas webs y tiendas especializadas-, pero debemos tener en cuenta, que a pesar de esa suciedad que nos pueden dejar, son muchos más los beneficios que nos aportan.