La Gaviota cabecinegra Ichthyaetus
melanocephalus es una gaviota de pequeño tamaño, hábitos
gregarios y migradora. En Marbella es una migrante e invernante, que
se alimenta tanto en mar abierto como en masas de agua dulce,
llegando incluso a encontrarse tierra adentro donde aprovecha
recursos tróficos como las aceitunas, los insectos y cualquier otro
recurso presente en el medio. Es pues una especie que podríamos
denominar como oportunista, al aprovechar un amplio abánico de
posibilidades en su alimentación. En España solo cría en algunos
enclaves del mediterráneo en un porcentaje ínfimo respecto a su
población global, que se estimó en la década de los 90 del siglo
anterior en unas 300.000 parejas, la mayoría de ellas en Ucrania.
Originaria del Mar negro, empezó su
expansión hacia Europa y el mediterráneo a partir de los años
cincuenta del pasado siglo, por lo que se puede decir que es una
especie de reciente aparición en nuestras costas, con apenas 50 años
de presencia constatada en ellas. Suelen verse desde julio, cuando
llegan desde sus colonias de cría, hasta abril cuando termina el
paso prenupcial, que en nuestra costa es bastante patente; pero al
ser mucho menos numerosa que otras parientes como la Gaviota
patiamarilla o la Gaviota reidora, su observación no resulta del
todo fácil, siendo una de las gaviotas más escasas en cuanto a
observaciones en Marbella. Ello no impide que al ser una especie de
hábitos gregarios, puedan en ocasiones formar bandos de varios
cientos de individuos que merodean por costas y campos en busca de
alimento.
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