Prácticamente desde principios del presente siglo se vienen detectando, tanto en nuestra localidad como en otras de la costa, la presencia de esta rapaz nocturna, el cárabo común Strix aluco en pleno casco urbano, al abrigo de las arboledas. Son bastantes las observaciones en los últimos años, y en lugares diferentes, e incluso se ven sin demasiados problemas ejemplares jóvenes, lo que parece indicar que se reproducen con cierta asiduidad, ya sea en el propio casco urbano o en zonas aledañas.
Esta strigiforme de mediano tamaño y gran adaptabilidad, ha prosperado bastante y en la actualidad, es de las pocas que no presentan serias amenazas.
Caza una gran variedad de presas de mediano tamaño, del conejo hacia abajo, incluyendo aves hasta del tamaño de palomas, y no descartando algún pequeño reptil, anfibio e incluso insectos de cierta entidad.
Su hábitat óptimo son las formaciones forestales, pero como he mencionado ha sido capaz de adaptarse y es capaz de vivir en plena ciudad al abrigo del arbolado existente.
Vive en gran parte de Eurasia -evitando las zonas más frías- en el norte de África y Oriente Medio. En España es más común en el norte, pero no falta en el sur, excepto en las zonas más áridas y desarboladas.
Muestra un comportamiento territorial muy acusado y no realiza movimientos migratorios, siendo fieles a su territorio todo el año, por lo que su observación puede darse durante todo el año, si bien resultan más fáciles de detectar a partir de noviembre/diciembre cuando comienza el celo y es entonces cuando más vocalizaciones emite. Su canto es un “ulular” muy característico y se puede decir que inconfundible, que podemos oír desde ya, en nuestra ciudad.
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