Por estas fechas, ya plenamente primaverales, las Perdices rojas Alectoris rufa, se encuentran incubando su nidada.
Mientras la hembra se dedica a esta ingrata tarea, el macho merodea por los alrededores animándola con su singular canto.
Ayer, a pesar de la lluvia, este "pájaro perdiz" como vulgarmente se le conoce, se "pavoneaba" en las primeras estribaciones de Sierra Blanca.
La Perdiz roja pertenece a la familia Phasianidae, caracterizada por realizar casi todo su ciclo biológico a ras de tierra. Construye su nido en el suelo, al abrigo de algun matorral, donde tras la larga incubación, naceran los "perdigones", que inmediatamente abandonaran el nido y seguiran a la madre en su constante deambular en busca de alimento. Al finalizar la época de cría formaran bandos más o menos numerosos y llevaran una existencia discreta.
Ocupa una gran diversidad de ecosistemas, desde cultivos hasta laderas montañosas y se alimenta de insectos y materia vegetal.
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