Durante este mes es muy notorio el paso de multitud de aves que cambian de continente para pasar el invierno en la cálida África.
Hoy se dejaban ver bastantes Papamoscas cerrojillos Ficedula hypoleuca por nuestros campos, todavia resecos por el intenso estío.
Además una Culebrera europea Circaetus gallicus, cambiaba de posadero desde un árbol hasta una torreta eléctrica, desde donde divisa una gran cantidad de terreno y puede localizar a sus presas preferidas: las serpientes.
Esta especialista en reptiles también es una migradora transahariana, aunque este ejemplar todavia permanece en Marbella apurando sus últimas jornadas. En unos días, o a lo sumo unas semanas, se dirigirá al estrecho para dar el gran salto al vecino continente, donde permanecerá hasta finales de enero o principios de febrero, cuando regresará a la tierra que la vio nacer. Solo queda desearle un feliz viaje y estancia en tierras africanas y que el próximo año nos vuelva a deleitar con su impresionate presencia.
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