A pesar de encontrarnos en pleno verano, desde hace unas semanas se detectan los primeros movimientos migratorios de algunas especies de aves que abandonas sus lugares de cría y emprenden el viaje a sus lugares de invernada. Es el caso de esta pequeña avecilla el Carricerín común Acrocephalus schoenobaenus, un ave que no cría en España de manera habitual, aunque es posible que alguna pareja aislada lo haga en algún humedal del norte ibérico. La población reproductora se distribuye desde Francia hasta Rusia e inverna en el África subsahariana. En sus movimientos migratorios es posible la observación de estos viajeros transcontinentales en estas latitudes; concretamente este se encontraba en Estepona, en una zona palustre, que constituye su hábitat natural.
Su presencia fue detectada hace ya un par de semanas, a mediados de julio, al igual que también pude comprobar el movimiento de varias especies de Gaviotas (reidoras, audouin, cabecinegra), que abandonas sus colonias de cría y se dirigen a sus zonas de invernada,
Un trasiego constante que a partir de ahora se incrementará notablemente.
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