sábado, 29 de noviembre de 2025

Predominantemente negros.

 

En los humedales de Marbella y su entorno,, la invernada ya es muy notoria. Hoy me centraré en dos especies ligadas a medios acuáticos de coloración predominantemente negra, aunque con matices.

El cormorán grande Phalacrocorax carbo es un invernante que desde principios de siglo, más bien desde finales del pasado, ha ido incrementando su población invernante en nuestra localidad. Desde hace unos años más bien permanece estable. Pero en todo caso es un ave común en entornos costeros y fluviales del término, donde forma dormideros de cierta entidad.

Es un excelente pescador al buceo, que cuando pasa un tiempo en el agua, necesita secarse en algún posadero, pues no posee -como otras aves marinas- una impermeabilidad total. Cría en algunos embalses andaluces, pero en la provincia de Málaga, de momento no.

Cormorán grande

Por su parte la focha común Fulica atra, puede verse en Marbella prácticamente todo el año. Puede que alguna pareja críe -no estoy seguro-, pero en todo caso la caída de la población reproductora en nuestra localidad ha sido notoria desde hace unas décadas. Aunque no es muy exigente en cuanto a su hábitat, si que requiere de ciertas características en él, que a día de hoy están en entredicho.

Focha común

Como invernante ya es otro tema. Como se reciben ejemplares más norteños durante la invernada, algunos suelen recalar en nuestros humedales. Pero también en menor número que antaño. He detectado un par de ejemplares recientemente en un humedal. Esto hace unos años sería una debacle. Hoy es un lujo.


domingo, 23 de noviembre de 2025

Singular y escasa invernante.

 

La agachadiza común Gallinago gallinago es una de las aves invernantes más singulares que encontramos en Marbella. El desproporcionado tamaño de su pico es el rasgo más llamativo de esta peculiar limícola, habitante de una gran variedad de ambientes acuáticos. Sin lugar a dudas el mal estado de nuestros cursos fluviales y humedales en general, hace que sean muy escasas en invernada en nuestra zona, siendo relativamente frecuentes en otros humedales ibéricos mejor conservados.


Es un ave esquiva y huidiza lo que complica un tanto su detección, pero allí donde encuentra hábitat adecuado es posible encontrarla, aunque en nuestro municipio siempre en bajo número por lo anteriormente expuesto. Busca su alimento introduciendo su largo pico en las aguas someras en busca de invertebrados acuáticos. Por ello necesita de ambientes medianamente bien conservados, donde se encuentren sus presas, de ahí su escasez a nivel local. 


Tiene una amplia distribución mundial, que comprende gran parte de Eurasia y Norteámerica. En Iberia se reproduce en dos nucleos: uno en Galicia - que penetra algo en Portugal-, y otro en Castilla León, pero no es una población muy significativa. Sin embargo durante la migración y la invernada puede encontrarse en casi cualquier punto de la península, siempre que exista hábitat adecuado. Las recuperaciones de aves anilladas indican que la mayor parte de las invernantes ibéricas proceden de Escandinavia y el centro de Europa.


Donde la he detectado hoy, es un lugar en el que ya la he visto años atrás; pero como hemos tenido unos años de intensa sequía, llevaba tiempo sin verla. Es una especie muy sensible al cambio climático, precisamente por esto, y habrá que ver si este ejemplar permanece en la zona o simplemente está de paso hacia otro lugar más adecuado a su modo de vida.

martes, 18 de noviembre de 2025

Tarabilla europea, común pero no tanto.

 

La tarabilla europea Saxicola rubicola es un pájaro común en Marbella. Común pero tampoco abundante. Por su forma de capturar a sus presas - insectos-, suele dejarse ver en zonas despejadas, normalmente sobre un matorral, desde donde otea su entorno en busca de algo que cazar.




Por lo tanto no resulta difícil detectar y esto puede llevar a pensar que son muy comunes, pero en realidad tiene una tendencia ligeramente decreciente en Iberia y a pesar de ello no deja de ser común, al menos de momento.

En Marbella se puede ver todo el año, pero en invierno aparece en zonas donde no se encuentra durante la reproducción, lo que indica posiblemente que hay movimientos migratorios; algunos de poca entidad, como desplazamientos altitudinales, pero además se sabe que se reciben ejemplares de otras zonas de Europa durante la invernada.




En definitiva: es común todo el año y algo más durante la invernada. Y además no es muy difícil observar en zonas con poca vegetación, normalmente pastizales y matorrales bajos.


domingo, 16 de noviembre de 2025

Algo es algo.

 

El zampullín común Tachybaptus ruficollis, era hasta principios del siglo, un reproductor no muy numeroso, pero presente en algunos de nuestros humedales. Esto ha cambiado radicalmente en unas décadas y hoy puede afirmarse que no lo hace.

Solo se dejan ver algunos -más bien pocos- durante la invernada, cuando algunos ejemplares más norteños o incluso ibéricos, se desplazan a zonas más atemperadas. Hoy tuve la “suerte” de localizar a un solitario ejemplar en un humedal de nuestra localidad. No es mucho, pero algo es algo.


La causa de esta rarefacción probablemente hay que buscarla en el mal estado de los humedales de Marbella, donde por razones antropogénicas principalmente. Apenas disponen de vegetación acuática sumergida, condición indispensable para la presencia de este podicipediforme.


No se le considera amenazado, pero esto no implica que se encuentre libre de amenazas, y de hecho como dije antes, en nuestra zona va en caída libre.

jueves, 13 de noviembre de 2025

La migración continúa.

 

Todavía a estas fechas, entrando ya en mediados de noviembre, existe migración activa en Marbella y además es un paso diurno y generalmente en bandos de variable densidad.

Hablo de la migración de fringílidos, aves canoras muy apreciadas antaño por su canto, y que protagonizan ahora el paso migratorio. Hace un par de días observé en una zona dunar de nuestro término, varios de estos bandos, fundamentalmente de jilguero europeo Carduelis carduelis, pero también de serín verdecillo Serinus serinus. No es nada raro incluso que estos bandos migratorios sean mixtos, con éstas y otras especies de esta familia.

Jilguero europeo


Los fringílidos tienen un comportamiento migratorio bastante complejo; pero resumiendo bastante, hay aves del centro y norte de Europa que invernan en Iberia junto a las nativas, pero otra fracción importante cruza hasta el N de África. Incluso parte de la población ibérica lo hace. Son aves en esta época muy gregarias y bastante nómadas, y cabe esperarse casi cualquier comportamiento migratorio en ellas.

serín verdecillo

Sea como sea, es un auténtico espectáculo observar estos bandos migratorios, generalmente cerca de la costa, pues ya desde ella divisan su objetivo:el vecino continente, y un rato de observación puede deparar números considerables de aves en movimiento migratorio.


sábado, 8 de noviembre de 2025

Invernante urbano.

 

Es el único de su familia - los hirundínidos-, que permanece en Europa al llegar el otoño. Golondrinas y aviones marchan a África, pero el avión roquero Ptyonoprogne rupestris se ha adaptado a pasar el invierno en Europa, no sin algunos problemas derivados de la meteorología adversa, que puede llegar a dejarlos sin alimento en algún momento.


Desde octubre se dejan ver en plena ciudad, patrullando entre los edificios, pero también en ambientes fluviales y costas y prácticamente en cualquier lugar, ya que son aves que pasan gran parte del tiempo volando. Consumen pequeños insectos que capturan al vuelo, principalmente moscas y mosquitos, como el resto de sus congéneres.


En Marbella pueden llegar a formar dormideros importantes en plena ciudad, de decenas o centenares de individuos. En tiempos recientes incluso se ha llegado a detectar su reproducción, no en zona urbana, pero si en algunas infraestructuras, como puentes.

lunes, 3 de noviembre de 2025

Diminuto.

 

El reyezuelo listado Regulus ignicapilla, junto a su pariente, - de distribución más norteña-: el reyezuelo sencillo, son las aves más pequeñas de Europa. De hecho el sencillo es unos milímetros más pequeño, pero esto es anecdótico. En todo caso son aves diminutas, con apenas 9 cm de cabeza a punta de la cola.

Eminentemente insectívoro, consume pequeños colémbolos, arácnidos, pulgones, y cualquier pequeño insecto que se cruce en su incesante deambular en el arbolado.


Se ha vuelto frecuente en Marbella. Tanto en el medio natural, donde prefiere las coníferas -en nuestro caso pinos-, pero también se encuentra en otras formaciones arboladas, incluyendo el arbolado urbano. Es más frecuente en parques y jardines, pero está presente también en arbolado disperso en plena ciudad.

A nivel de España presenta una tendencia positiva, según el programa SACRE de Seo /Birdlife. En nuestra ciudad es un reproductor habitual, incluyendo el medio urbano, pero en invierno aumenta notablemente la población con la llegada de aves más norteñas.


El nombre específico de ignicapilla, viene a significar “cabellera ardiente”. Y es que cuando se “enfada” -normalmente por la presencia de algún congénere en su territorio-, enerva su cresta eréctil de color anaranjado para amedentrar al intruso.

Como dije antes, se ha vuelto bastante frecuente en zonas donde hace unos años no pensaría que pudiera encontrarme con ellos. No es que sean abundantes, pero si que se nota un notable incremento, tanto en número como en espacios que ocupa.